Se trata de una residencia magnífica, rodeada de hermosos jardines, que data del año 1779 y recrea la bella época del sureste mexicano. Cuenta con 12 habitaciones, 10 de ellas suites junior y 2 suites, distribuidas en una planta. Parte de las instalaciones son un hall de entrada con arreglo floral y bandeja de frutas, recepción abierta las 24 horas, servicio de ""turn-down"" diario, servicio de cambio de divisa, bar, sala de juegos, restaurante, sala de conferencias, conexión a Internet, servicio de habitaciones y de lavandería. Además, tiene a su disposición mensajería, librería, asistencia profesional para preparar un programa de actividades personalizado, sótano para guardar bicicletas y alquiler de las mismas, aparcamiento y parque infantil.